Mi urgencia en crear el Seminario de Primer Año, “Crossing Languages and Living in Translation” nace de mis propios cruces o traspasos lingüísticos: mis propios riesgos y triunfos como traductor, como intermediario cultural—y como sujeto que conecta más de una otredad. Hubo una etapa en mi vida cuando nada en mi educación me indicaba que la lengua que hablaba en mi hogar merecía admiración y respeto. Fue por eso que en Amherst diseñé un curso para ayudarle a estudiantes multilingües a darse cuenta de que su lengua natal es un tesoro, y de que no están solos al sentirse ambivalentes o más aún, en conflicto con sí mismos y deprimidos por las presiones ejercidas al sentir los requerimientos de la asimilación y de la supresión lingüística….Continue Reading Fragmentos de una Carta